La asociación Promusicae ha publicado su tradicional informe anual en el que hacen balance de la situación del mercado musical nacional durante el último año.
Según los datos revelados por el documento de Promusicae, la venta de música grabada descendió en España por duodécimo año consecutivo en 2013, una histórica bajada que parece no tener suelo desde que empezó a descender en 2001. Los españoles se gastaron 119,8 millones de euros en comprar música durante los últimos doce meses, una cifra que equivale a un recorte del 15,1 por ciento si la comparamos con la de 2012,.
La venta de soportes físicos han seguido su trayectoria descendente de manera muy acentuada, pero la gran sorpresa ha sido el leve descenso del sector digital, con un 0,35 por ciento menos, un dato poco esperanzador para un mercado que ha seguido creciendo este año en otros mercados como el británico o el estadounidense.
El importe total del mercado físico se queda en unos 71,7 millones de euros, un 22,8% menos que en 2012 (92,8 millones). Del formato CD se despacharon unos 9,5 millones de unidades en total, mientras que el vinilo subió a los 140.000 LPs vendidos.
En el sector digital, el único ascenso destacado ha sido protagonizado por los servicios de streaming como Spotify, Deezer o Napster, que ya suponen un desembolso anual de 20,3 millones, un 9,4 por ciento más que en 2012.