El mundo del flamenco está de luto por la muerte de uno de sus máximos representantes, el artista que abanderó la evolución del género.
El pasado 10 de diciembre, el cantaor entró en coma por un infarto cerebrar tras ser operado de cáncer de esófago en la Clínica de la Luz de Madrid, falleciendo tres días después en ese mismo hospital.
Con la muerte de Enrique Morente se va una gran figura del flamenco, uno de los grandes maestros de este arte que últimamente se encontraba de celebración tras ser declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
Su muerte viene acompañada también de dos noticias muy desagradables: el robo que sufrieron en su casa del barrio del Albaicín (Granada) el mismo día del fallecimiento del cantaor, y la denuncia que sus familiares han decidido poner a los médicos por Mala praxis.
Muchos artistas ya han manifestado su deseo de que pronto se organice un gran homenaje en torno a la figura de este gran cantaor y estudioso del género del flamenco.