Coincidiendo con el lanzamiento del último disco de Ariana Grande (Eternal Sunshine), cabe preguntarse cuál es el mejor disco de la artista de Boca Ratón. Lo confieso, no puedo evitar dar este curioso dato cada vez que tengo la oportunidad.
Icónica por su coleta alta, con el paso de los años se ha convertido en una de las artistas más importantes del panorama pop. Entre sus éxitos se encuentran “Problem”, “Dangerous woman”, “Side to side” o “7 rings”.
A estos se suma su último single, “Yes, and?”, que interpola el célebre “Vogue”, de Madonna. En él, Grande nos invita a ser nuestros mejores amigos y a hacer lo que nos dé la gana a pesar de las opiniones de los demás (y la queso, que dirían los más jóvenes). Aunque no son más que elucubraciones, este sonido me hace presagiar su propio Renaissance, que fue uno de mis discos favoritos de 2022.
Hasta que llegue el lanzamiento de Eternal Sunshine, he decidido analizar cuál me parece el mejor disco de Ariana Grande ordenando todos sus trabajos hasta el momento según mi criterio.
¡Allá vamos!
#6 My Everything (2014)
El segundo disco de Ariana Grande tenía el objetivo de llevarla más allá de su faceta r&b y presentarla como diva pop a escala internacional. El éxito de sencillos como “Problem”, “One last time” y “Break free” la convirtieron en una de las artistas más exitosas. Desde entonces su carrera ha sido imparable.
Lo mejor: la ambición del proyecto y los singles mencionados, que siguen siendo de las mejores canciones de toda su carrera. Es divertido.
Lo peor: no hay concepto detrás del disco y no tiene entidad propia en su conjunto. Abarcaron demasiados géneros y varias de las canciones de corte r&b no dicen mucho, cuando sí lo hacían en su disco debut.
#5 Yours truly (2013)
El primer proyecto de la artista trataba de posicionarla como la Mariah Carey de la nueva generación. Tenía la voz, tenía la ilusión y tenía las canciones. El disco resultaba un cruce entre melodías clásicas y las producciones más modernas de la época que se realizaban en torno al género r&b.
Lo mejor: “Honeymoon Avenue” y “Tattoed Heart” (posiblemente su mejor balada). Es un disco coherente y atemporal que ha sobrevivido muy bien al paso de los años. Transmitía muy bien quién era Ariana Grande y quién quería ser.
Lo peor: hay canciones que no aportan mucho y entorpecen la secuencia porque parecen calcos de otros temas mejores del disco, como “Lovin’ it”, “Piano” o “You’ll never know”. Tampoco entiendo la producción de “Better left unsaid”.
#4 Dangerous woman (2016)
Un proyecto con estilos tan variados podría haber sido un batiburrillo y, sin embargo, fue el disco que consolidó a Ariana Grande. A través del concepto y de una secuencia muy bien ordenada fluyen los temas pop más bailables (“Into you”, “Side to side”, “Touch it”) con cortes r&b más clásicos (“Let me lonely”, “Moonlight” o “Dangerous Woman”).
Lo mejor: cómo suena su voz, las canciones bailables y que todos los discos a partir de este son joyas.
Lo peor: que “Greedy” no fuera single, cuando es una de las mejores canciones de su discografía. Que el disco tiene un componente prefabricado para hacer de Ariana una estrella del pop, pero eso la hace sonar encorsetada y falta de alma en varios temas (más tarde ella misma confirmaría que algunas de sus canciones más pop las grabó para tener más repercusión y ser más reconocida).
#3 Positions (2020)
Este es un disco suavito de r&b, mucho más chill y desenfadado que sus producciones anteriores (que estuvieron marcadas por capítulos más oscuros en su vida). En Positions se la ve tranquila, disfrutona y cómoda. Ariana convence en esta faceta más sensual y relajada. Decidió ir más allá con los arreglos de las canciones, como las cuerdas en “Shut up” y “Positions” o los vientos de “My hair”.
Lo mejor: es uno de los discos de Ariana Grande que mejor fluye de principio a fin. Es coherente sin llegar a ser reincidente en el mismo sonido. Se la nota cómoda y da la sensación de que transmite quién es ella, su personalidad y lo que le gusta. Ella está al mando.
Lo peor: la edición deluxe, que no aportan absolutamente nada. Lo infravalorado que está por muchos de sus seguidores. No cuenta con hits instantáneos.
#2 Sweetener (2018)
Es inevitable hablar de Sweetener y no mencionar su trágico antecedente, el atentado que tuvo lugar en uno de sus conciertos durante la gira Dangerous Woman World Tour. A raíz del evento, la artista se empoderó, edulcorando la realidad para hacerla más apetecible y a la vez mostrándose vulnerable. En este álbum confluye su inquietud por el r&b, una forma de cantar más relajada y un deseo por seguir explorando nuevas texturas musicales.
Lo mejor: es el disco en el que empezamos a conocerla realmente desde su debut. Nos muestra quién es ella y la dirección que quiere seguir a partir de ese momento. Su voz en todos sus registros. “No tears left to cry”, la mejor canción de toda su discografía. Cuando ahonda en temáticas sobre salud mental, como “Breatin” o “Get well soon”.
Lo peor: “Borderline”. La era duró un día y medio porque enseguida arrancó con Thank u, next. Los sencillos fueron poco representativos de la totalidad del disco.
#1 Thank u, next (2019)
Desde su predecesor, Sweetener, los discos de Ariana Grande han estado especialmente marcados por los acontecimientos personales que ha vivido. Este llega poco después de la muerte de su expareja, el rapero Mac Miller, y de la separación con quien era su prometido, Pete Davidson.
Thank u, next es un disco deliberadamente contemporáneo, que evoca al pop y al r&b cercanos al trap que tanto éxito tuvo durante los últimos años de la década pasada, pero en el que la artista suena natural para hacer frente a la adversidad y extraer una lección de cada cosa mala que le había pasado.
Lo mejor: prácticamente todo. La coherencia sónica. Las letras que nos permiten conocerla y con las que es fácil sentirse identificado. Las lecciones tras las canciones acerca de abrazar lo bueno y dejar ir lo que ya no pertenece a nuestras vidas (la mayoría tienen una moraleja). Las melodías. El sentimiento detrás de cada canción y lo honesto que se siente el disco al completo.
Lo peor: “Make up”. Que la era no fuera más larga y no sacara más videoclips.
Hasta el lanzamiento de Positions la artista había sido realmente prolífica, lanzando casi un disco al año. Eso sin contar otros lanzamientos menores, como reediciones, álbumes en vivo o su EP navideño. Por eso, hay tantas ganas de ver si lo nuevo de Ariana Grande se encuentra entre lo mejor de su carrera.