Christina Aguilera acaba de empezar con la promoción de su nuevo álbum ‘Liberation’, que verá la luz en junio seis años después de su predecesor ‘Lotus’. La artista ha comenzado la promoción con un sencillo espectacular en el que colabora con Ty Dolla $ign y 2 Chainz y que se mueve a medio camino entre el pop, el hip-hop y los ritmos tribales. De este modo, Christina nos ha sorprendido dándole una vuelta de tuerca a su sonido, presentando algo completamente nuevo y diferente a todo lo que ha hecho anteriormente.
A pesar de esto, sus fans siempre han reclamado a lo largo de los años una vuelta a su sonido ‘Stripped’, su segundo disco más vendido hasta la fecha (solo por detrás de su debut, que contenía fantásticos temas como “Genie in a bottle”) y el más apreciado por todos. Después de este disco, Christina iría vendiendo cada vez menos con cada trabajo que sacaba, a pesar de que en ningún momento ha flojeado en cuanto a calidad artística. De ahí que venga a defender la carrera discográfica de Christina a pesar de que con el tiempo haya ido perdiendo en popularidad.
El primer álbum que publicó después de ‘Stripped’ fue ‘Back to basics‘. De primeras, fue todo un choque teniendo en cuenta la estética años 20-30-40, que contrastaba enormemente con la imagen extremadamente sexualizada que había mostrado en Stripped. Mucho se ha hablado recientemente de cantantes como Miley Cyrus, Lady Gaga o Kesha que se han acercado a estilos más “sofisticados” después de haber triunfado con una imagen más macarra, sexual o ida de la olla y ya fue algo que hizo Christina hace doce años cuando le dio una patada a su yo anterior mediante este ‘Back to basics’, que no era sino un homenaje a todas sus divas favoritas del jazz y del soul.
En el disco, además, había cabida para el R&B, el doo wop o el swing y los sencillos fueron muy bien escogidos, destacando “Candyman” y particularmente “Hurt”, una de sus baladas más famosas. La cantante se arriesgaba además con un CD doble que contenía nada menos que 22 canciones y en todo momento sonaba vintage. Además, descubrimos que era capaz de enamorarnos también con susurros gracias a canciones como “Save me from myself”.
Aunque hubo un paréntesis con su álbum recopilatorio, en el 2010 nos trajo un disco completamente inédito, ‘Bionic’. Soy consciente de que poca gente estará de acuerdo conmigo, pero este es sin duda mi disco favorito de Christina, ya que en ocasiones era bastante experimental y mezclaba los sonidos más electrónicos con los más orgánicos, dando como resultado un disco de sonido futurista que me pareció que, en su momento, estuvo en la vanguardia del pop internacional.
Este álbum mezclaba a la perfección los temas más juguetones, divertidos y sensuales con otros más serios e intimistas, pero al final el conjunto era muy interesante y había sensación de unidad gracias a los interludios, que servían para dar cohesión al conjunto. Eso sí, me parece un drama que grandes temas como “Birds of prey”, una balada electrónica de lo más oscura, quedara relegada a bonus track de la edición de lujo cuando es, sin duda, una de las mejores canciones que le he oído cantar.
Tras este movimiento, se dice que Christina volvió al pop de sus orígenes, afirmación que me perturba un poco ya que su disco de debut y ‘Lotus’ no tenían nada que ver aparte de que eran, sin duda, un producto para las masas. Es cierto que no resultaba tan sorprendente como sus trabajos predecesores, pero aún así Lotus contaba con la magia de ser un disco resultón y muy entretenido que reflejaba en todo momento la personalidad de Christina Aguilera. Al margen de lo maravilloso que era el electropop de “Your body”, había canciones fantásticas como la dinámica “Red hot kinda love” o la chillona “Circles” (en la que Aguilera mandaba a alguien al carajo).
Con el paso del tiempo, Lotus ha quedado grabado en la mente de los fans como el mayor fracaso de Christina Aguilera y, si algo es cierto, es que la promoción durante esta era dejó bastante que desear a pesar de que era un disco con la esencia de la artista que al mismo tiempo abrazaba los sonidos más actuales del momento.
Seis años después, estamos esperando a descubrir qué es lo que contiene Liberation. De momento, lo que nos muestra a través de su canción y vídeo es que ahora debemos situarla en un plano algo más experimental y que, con una canción como esta, su mayor preocupación no es la de copar las listas de éxitos mundiales. Aún así, desde aquí mi enhorabuena por el arriesgado corte con el que nos presenta su nuevo trabajo.